La PALMERA TRACHYCARPUS FORTUNEI engalana parques y jardines

Esta especie vegetal del género Trachycarpus procede de china y es capaz de adaptarse a lugares con diferente climatología, incluso a regiones frías. Por ello, es frecuente su uso ornamental para embellecer terrenos y parterres.

Taxonomía de Trachycarpus fortunei

Esta palmera se conoce comúnmente como palmito gigante, palmera de Fortune, palma de jardín, palmito elevado, palma excelsa o palmera china en abanico.

Trachycarpus fortunei (Hook.) H. Wendl pertenece al género Trachycarpus que se clasifica dentro de la familia Palmae, incluida dentro del orden Palmales y en el interior de la clase Liliopsida. Además, se engloba en la división Magnoliophyta del reino Plantae.

Es frecuente el cultivo de Trachycarpus fortunei en parques y jardines de la península

Esta palmera posee un tronco único que puede llegar a medir 12 – 15 metros de altura. Esta estructura es más gruesa en la parte superior y suele llevar adherida una estructura fibrosa brillante y oscura compuesta de hojas viejas.

Sus hojas son palmeadas, tienen forma redondeada y son capaces de alcanzar 1,2 metros de diámetro, siendo de color verde oscuro en el haz y grisáceo en el envés.

Trachycarpus fortunei florece en abril – mayo, generando flores olorosas y de color amarillo. Sus frutos son bayas trilobuladas que tienen forma de riñón y adquieren un color negro – azulado al madurar.

Requerimientos de cultivo de Trachycarpus fortunei

Esta especie del género Trachycarpus es capaz de asentarse sobre cualquier tipo de suelo, aunque prefiere terrenos bien drenados y ricos en nutrientes.

Así mismo, a pesar de no requerir un aporte excesivo de nutrientes, crece con mayor robustez al recibir materia orgánica de manera ocasional y fertilizantes minerales.

Por otra parte, entre las plagas que afectan al Trachycarpus fortunei se puede mencionar al barrenador de las palmeras (Paysandisia archon).

Curiosidades de Trachicarpus fortunei

Esta palmera es capaz de resistir no sólo el frío y la nieve sino también altas temperaturas, llegando a soportar hasta 43 º C.

La plantación de este vegetal se perfeccionó, en un inicio, para la obtención de fibra a partir de sus hojas, compuesto que era empleada en el sector textil. Esto es así porque el tronco queda rodeado por una serie de vainas viejas, estructuras que los chinos empleaban para producir sandalias, cuerdas, tejidos bastos o sombreros.

En resumen, debido a la resistencia y exuberancia de Trachycarpus fortunei es frecuente encontrarlo en parques y jardines, dando un toque exótico al entorno en el que se localiza. De esta manera, estos verdes lugares adquieren un nuevo atractivo para sus visitantes.