Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas marcan el horizonte de la denominada Agenda 2030, «un plan para lograr un futuro mejor y más sostenible para todos». En ese sentido, el gobierno español se ha fijado como meta para este 2023 convertir al país en «una nación referente de sostenibilidad» para Europa y el mundo. ¿Cómo pretende el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 español alcanzar este logro? En Paisajismo Digital lo analizamos a continuación.
El contexto ambiental español
En 2022, España cumplió con las metas fijadas en 69 de los 118 indicadores asociados a los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) fijados en la Agenda 2030. El Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 presentó su Informe de Progreso 2022, con el cual la nación ibérica se sitúa en el puesto 16º de 163 países analizados, alcanzado un nivel aceptable en otros 20 ODS.
Con ello, en cuanto a indicadores como “pobreza” (ODS 1), “salud y bienestar” (ODS 3); “calidad educativa” (ODS 4); “equidad de género” (ODS 5); “agua y saneamiento” (ODS 6); “energía limpia” (ODS 7); “ciudades sostenibles” (ODS 11); “justicia e instituciones” (ODS 16) y “alianzas internacionales” (ODS 17), el Gobierno español muestra un avance importante, según especifica el reporte de Fernando De la Cruz Prego para el diario El País.
Sin embargo, hay otros 27 indicadores de los ODS en donde el Estado español sigue teniendo un rendimiento deficiente. Este es el caso de los indicadores de “hambre y seguridad alimentaria” (ODS 2); “consumo y producción sostenible” (ODS 12); “acción climática” (ODS 13); “océanos y mares” (ODS 14) y “biodiversidad” (ODS 15). A su vez, hay problemas en el ámbito económico, tal es el caso de “trabajo decente y crecimiento económico” (ODS 8); “industria, innovación e infraestructura” (ODS 9) y «desigualdades» (ODS 10), este último referente a algunos aspectos específicos de carácter social.
Con ello, el panorama luce un tanto más claro para comprender en qué ámbitos debe centrar su atención el gobierno español para afianzar al país como referente de sostenibilidad. Para alcanzar esta meta es vital cumplir con los denominados ‘ejes del desarrollo sostenible’, los cuales repasamos a continuación.
Los ejes del desarrollo sostenible en España para 2023
Para España y todas las naciones de la mancomunidad europea, es fundamental adaptar sus economías para cumplir con la denominada ‘sostenibilidad ambiental’. El respeto por el medio ambiente a través de prácticas como el reciclaje, la recolección y tratamiento óptimo de desechos, además de la preservación de los ecosistemas, son claves para alcanzar un desarrollo urbano que se adapte a lo que pide Naciones Unidas. En ese contexto, estos son los ejes del plan español para convertirse en referente sostenible.
Sostenibilidad
En cuanto a sostenibilidad, una de las estrategias apunta hacia la agricultura sostenible. Huertos urbanos que conjuguen técnicas de jardinería vertical y techos verdes donde se incentive la producción local minimizando el impacto ecológico. También destacan aspectos como la recolección de desechos, la reducción del consumo energético y el reciclaje. Cada detalle cuenta para establecer un sistema de economía circular que proteja el ecosistema aprovechando al máximo los recursos disponibles.
Productividad
Del mismo modo, la productividad evidencia los problemas de España para estimular el desarrollo humano y el crecimiento económico. La pandemia impactó a muchos sectores de la economía local y es urgente incrementar tanto la inversión empresarial como el apoyo a la educación. Bajas calificaciones en el Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes o examen PISA (por sus siglas en inglés), junto al incremento de la deserción estudiantil, denotan un panorama complejo que debe corregirse.
Equidad
Por otra parte, la equidad está relacionada con la desigualdad social, un ámbito en el que España tiene aún un amplio margen de mejora. A temas como la igualdad salarial por género y la excesiva carga en renta domiciliaria se suman el incremento de la pobreza y la excesiva población reclusa. Si la meta es convertir a España en un referente sostenible, no puede obviarse la eficiencia redistributiva del gasto público. El Gobierno debe atender los problemas más urgentes de la población para garantizar un modelo perdurable, donde la calidad de vida no decaiga.
España, referente europeo en desarrollo sostenible
En Europa, la arquitectura sostenible ha ganado enteros en las dos primeras décadas del siglo XXI para construir las ciudades del mañana. España ha hecho lo propio para hacer frente a los problemas ambientales internos (contaminación, deterioro ecológico) y los efectos derivados del cambio climático, en su afán por convertirse en un referente de sostenibilidad para la región.
Al respecto, la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, admitió en una entrevista para Europa Press que el país debe hacer esfuerzos conjuntos para seguir impulsando las políticas aceleradoras del desarrollo sostenible. «España se ha constituido en estos años en un referente en cuanto a cumplimiento y el establecimiento de políticas coherentes con la Agenda 2030. Este camino que se ha abierto debe seguir transitándose, con la consciencia de que solo la transformación en el presente de los actuales desequilibrios en cuanto a sostenibilidad, desigualdad e injusticia permitirán un futuro digno para las generaciones que nos sucederán», explicó Belarra.
De acuerdo con la ministra, la pandemia del covid-19 representó un importante retroceso en cuanto a desarrollo económico y social se refiere, así como al deterioro de los servicios públicos en muchos países. Sin embargo, es optimista en que, a pesar de la «inestabilidad» de la región, España podrá alcanzar a corto plazo objetivos como «la solidez institucional, la reducción de la pobreza y de la exclusión, el uso de energías limpias o la innovación y la transformación de las infraestructuras», todos estos indicadores claves para la Agenda 2030.
Conclusiones de un paisajista
España es un país que ha tenido importantes avances en cuanto a crecimiento sostenible se refiere durante el último lustro. No obstante, todavía quedan muchos aspectos importantes por mejorar, si bien la postura estatal ya ha dado pasos firmes para continuar mejorando. El respeto al medio ambiente y la construcción de un mejor entorno para todos van de la mano. Más que imponer normativas, la Agenda 2030 busca orientar a las naciones para alcanzar objetivos que permitan adaptar a la humanidad para los cambios que, inevitablemente, experimenta el planeta.
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