En 2019, el Ayuntamiento de París abrió un concurso internacional para escoger un proyecto urbanístico para la renovación de las áreas cercanas a la Torre Eiffel. El diseño ganador fue de la firma británica Gustafson Porter + Bowman, pero la pandemia del Covid-19 obligó a postergar el inicio de las obras hasta el verano de 2022. En Paisajismo Digital te mostramos los detalles de este proyecto paisajístico que renovará las inmediaciones del monumento más emblemático de Francia.
«One», el nuevo parque alrededor de la Torre Eiffel
El proyecto One diseñado por Gustafson Porter + Bowman añadirá 200 árboles al área que conecta la Plaza del Trocadero, el Palacio de Chaillot, el Puente de Jena, el Campo de Marte y la Academia Militar. Con ello, las inmediaciones de la Torre Eiffel tendrán un 35% más de áreas verdes, en una intervención que incluye peatonalizar el famoso puente de Jena.
Gustafson Porter + Bowman es un estudio paisajista establecido en Londres en 1997 por los arquitectos Kathryn Gustafson y Neil Porter. Mary Bowman se unió al estudio en 2002 y, hoy día, cuentan Sibylla Hartel y Donncha O Shea como socios y el apoyo de un amplio equipo de arquitectos paisajistas y arquitectos de todo el mundo.
De acuerdo con Mary Bowman, «la primera fase del proyecto transformará la rotonda del Trocadero en terrazas de césped para crear vistas fantásticas vistas de la Torre Eiffel. Asimismo, esta intervención aumentará la cantidad de plantaciones alrededor de la fuente de Varsovia y reverdecerá todo el Quai Branly, optimizando los jardines alrededor de la Torre Eiffel.
Por su parte, Kathryn Gustafson aseguró que «los trabajos procuran que un sitio histórico tan importante sea más accesible a todas las personas y más sostenible y resistente desde el punto de vista medioambiental». Del mismo modo, la arquitecta británica explicó que han trabajado en el aumento de la biodiversidad en todo el sitio, incluyendo las modificaciones de las luces históricas para cumplir con las nuevas normas urbanas.
Más detalles sobre el proyecto One
Las obras del proyecto One comenzarán en el verano de 2022, a dos años del inicio de los Juegos Olímpicos de 2024 que se realizarán en París. Diseñada en 1887 por el ingeniero francés Alexandre Gustave Eiffel, la famosa torre de París «es tan atractiva que las visitas que registra han contribuido a desnaturalizar y transformar sin reflexión global con demasiados vehículos, turismo de masa y demasiados autobuses», dijo Jean-Louis Missika, arquitecto urbanista de la Alcaldía de París.
Por su parte, Anne Hidalgo, alcaldesa de la ciudad, comentó que «el objetivo es construir una zona peatonal muy vasta. Vamos a tener un jardín extraordinario para volver a oír el canto de los pájaros», aseguró la funcionaria, recalcando la importancia de la transformación paisajística que comenzará en verano.
En ese sentido, los vehículos particulares ya no podrán transitar por el puente de Jena, el cual será de uso peatonal exclusivo con un acceso especial para el transporte público y los medios de transportes blandos como la bicicleta. Asimismo, el número de carriles para los vehículos en la avenida Quai Branly se reducirá a la mitad, de cuatro a dos, con una zona cuyo límite de velocidad será de 20km/h para darle prioridad a los peatones.
A partir del otoño de 2024, después de los Juegos Olímpicos, se iniciará la segunda fase de las obras en el Canal de Marte. La inversión total del proyecto paisajístico será de 72 millones de euros (80 millones de dólares). Por su parte, el área total a intervenir será de 54 hectáreas.
Una obra insignia de 133 años de antigüedad
La construcción de la Torre Eiffel marcó un hito en la arquitectura mundial, pero fue una obra muy polémica. Entre enero de 1887 y marzo de 1889 (fecha de inicio y de culminación de la obra) hubo cientos de protestas en París contra la construcción del monumento, ya que muchos consideraban que se trataba de un gasto innecesario. Además, el diseño no gustaba a un sector de la población, tanto así que se recogieron firmas para derribarla una vez se inauguró.
No obstante, las quejas se fueron disipando y, a partir del siglo XX, la torre se convirtió en el icono más emblemático de la ciudad y de Francia, siendo uno de los monumentos más visitados en el mundo. La construcción de la torre tuvo que ver con la celebración del centenario de la Revolución Francesa, por lo cual el gobierno decidió crear la ‘Exposición Universal’. Con ello, se abrió un concurso para recibir proyectos arquitectónicos que permitieran construir obras de gran envergadura en un área de 96 hectáreas.
Las obras cumbre de la Expo fueron el Palacio de Máquinas y la Torre Eiffel, en un evento que se extendió desde el 6 de mayo hasta el 31 de octubre de 1899. El diseño de la estructura de 300 metros construida con hierro pudelado corrió por cuenta del famoso ingeniero civil francés Alexandre Gustave Eiffel (1832-1923). La torre fue la edificación más alta del mundo durante 41 años, hasta 1940. Actualmente, incluyendo la altura de su nueva antena de radio, la estructura alcanza una elevación total de 330 metros.
Los Olímpicos de 2024, el gran desafío para París
El gobierno francés ha destinado un total de 3900 millones de euros para la realización de los Juegos Olímpicos de 2024. El presupuesto inicial aprobado era de 7500 millones, pero la pandemia del Covid-19 obligó a reducir la inversión a casi la mitad. De acuerdo con el sitio oficial de París 2024, el 97% del presupuesto proviene del sector privado, con lo cual el gobierno evitará un colapso de la economía.
Asimismo, los Olímpicos de 2024 estarán marcados por la sostenibilidad. El gobierno firmó un acuerdo de cooperación deportiva con el Reino Unido para desarrollar estrategias ecologistas similares a las implementadas en los JJ.OO. de 2012 en Londres. Del mismo modo, se firmaron convenios con la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD) para cumplir el objetivo de «lograr un legado de sostenibilidad centrado en áreas como educación, salud, igualdad de género, discapacidad y paz a través del deporte más allá de las fronteras de Francia».
De esta forma, la Olimpíada de París acatará el llamado del Comité Olímpico Internacional (COI) de reducir el impacto ambiental en cada cita deportiva. En ese sentido, las ciudades anfitrionas de los próximos JJ.OO. aseguran tener «un mandato aún mayor para desempeñar funciones concretas y activas que permitan abordar los desafíos globales», entre ellos la contaminación ambiental y el cambio climático.
Conclusiones de un paisajista
En promedio, más de 30 millones de turistas visitan París al año y otros 7 millones de personas se suben a la Torre Eiffel. Por ello, el Ayuntamiento se propuso recuperar un área de 2 kilómetros cuadrados para aliviar los problemas de contaminación que genera la sobrepoblación mediante un paisaje sostenible que optimice la accesibilidad y el confort de los usuarios.
De esta manera, el proyecto One surge como una solución ambiental con criterios paisajistas para preparar a París de cara al futuro a mediano y largo plazo. La ciudad y el país recién se recuperan de las secuelas de la pandemia y, a poco más de dos años para el inicio de sus Juegos Olímpicos, esta mejora urbana en el centro de la ciudad llevará verde y oxígeno a un área caóticamente urbana.