Agradecemos a Gonzalo de la Fuente de Val, quien nos ha enviado esta carta y el Manifiesto, esperamos vuestro apoyo y difusión. Muchas gracias
Carta enviada al Comisario Michel Barnier en apoyo al reconocimiento oficial Europeo a la profesión de Paisajista en España.
A la Atención de:
Michel Barnier,
Comisario Europeo de Mercado Interior y Servicios
Comisión Europea, BERL 10/034
B – 1049 Bruselas, Bélgica
Estimado Señor Barnier,
Le escribo en nombre de un grupo de ciudadanos españoles dedicados a la práctica del Paisajismo, conocida internacionalmente y en inglés como Landscape Architecture. Nuestra profesión goza en nuestro país de una larga y distinguida trayectoria, aunque de escasa difusión fuera de nuestro entorno profesional.
La función del Paisajista, además de crear jardines, es la de modificar las características del territorio, tanto rural como urbano, para su uso y disfrute por parte de la sociedad. Son funciones propias del paisajista planificar, diseñar, y gestionar los espacios exteriores públicos y privados, aprovechando para ello las cualidades del lugar, su historia, el protagonismo del material vegetal, y la interacción de los seres humanos con los procesos naturales.
El paisajismo es una profesión que combina el arte y la ciencia, y que vincula el pasado con el futuro mediante su necesaria dependencia del tiempo y la naturaleza para el desarrollo de sus proyectos.
Algunas profesiones están especialmente adaptadas para favorecer la integración armoniosa del ser humano y sus actividades con la naturaleza. Otras proponen una utilización más racional de nuestro territorio y los recursos naturales y culturales que este ofrece para su máximo aprovechamiento económico y social sin mermar su valor ecológico y estético.
Entre estas profesiones destaca el potencial de las propuestas de la profesión de Paisajista.
El paisajismo no es ni una extensión, ni una alternativa a las diversas ingenierías ni a la arquitectura. Se trata de una profesión con su propio corpus filosófico, creativo e histórico, con sus propias tradiciones y fundamentos técnicos.
El paisajismo es una profesión complementaria a otras y no sustituye ni compite con ninguna de ellas.
Forma parte del acervo cultural de toda sociedad democrática, próspera y avanzada, y su presencia en los procesos de planificación del territorio es necesaria para matizar y contener sus excesos.
El paisajismo, a pesar de ser una profesión minoritaria, está lejos de ser marginal, dado el alto impacto ambiental, social y cultural de sus propuestas. La presencia del Paisajista profesional contribuye a diversificar, equilibrar y especializar el mercado de trabajo y valorizar económicamente la relevancia cultural de los oficios vinculados con la jardinería, la horticultura y las tecnologías ambientales.
El paisajismo contribuye a la mejora de la calidad de vida y conservación del medio ambiente en general de una manera clara, sencilla y económica.
Históricamente, han ejercido el paisajismo profesionales provenientes de distintas áreas académicas, a veces de manera informal y esporádica, pero siempre dentro de los conocimientos y criterios más avanzados de su época. Lamentablemente, muchos no pudieron formarse en España, a pesar de que existen instituciones de enseñanza paisajística reconocidas internacionalmente desde hace casi cuatro décadas.
Muchos paisajistas españoles se han formado en instituciones internacionales y han adquirido experiencia trabajando en equipos y proyectos pluridisciplinares. Su experiencia profesional en el exterior ha contribuido a renovar y enriquecer el ejercicio de la profesión en nuestro país mediante nuevas perspectivas y conocimientos.
Los tiempos han cambiado con las necesidades de la sociedad y se ha producido una importante especialización en el ejercicio de esta profesión. La profesión de paisajista ha sido reconocida y su ejercicio regulado en la mayoría de los países desarrollados. Al mismo tiempo, las universidades han abierto departamentos y facultades para ofrecer formación específica en paisajismo. Este proceso ha facilitado la estructuración de los mercados de trabajo y la aparición de equipos pluridisciplinares capaces de afrontar los retos de la sociedad moderna.
Desafortunadamente, ese proceso no se ha completado en España: el paisajismo no es aún una profesión plenamente reconocida y legalmente dotada de atribuciones suficientes para demostrar su potencial.
En los últimos años, diversas instituciones académicas y gubernamentales han intentado apoyar e impulsar la práctica del paisajismo desde otras disciplinas, lo que tan solo sirve para cubrir la brecha dejada por la profesión, sin cerrarla realmente. Por desgracia, podemos encontrar a personas que trabajan en el sector sin los más mínimos conocimientos exigibles, lo que confunde al consumidor, daña los intereses de la sociedad, perjudica la conservación del medio ambiente, y por lo tanto afectan el panorama profesional del mercado español como un todo.
El paisajismo es una profesión importante y compleja que implica un conocimiento artístico y científico diverso y amplio. Debe ser tratada como una actividad única e independiente, visto por la sociedad española con la misma seriedad y el énfasis que en otros países del mundo.
No podemos continuar posicionados en la retaguardia mundial en este tema. Naciones emergentes como Brasil han presentado propuestas de ley para regular y potenciar la profesión de Paisajista. No serán los últimos y los paisajistas españoles no deseamos continuar postergados en el único país europeo, junto con Grecia, que no reconoce esta profesión como tal.
Los paisajistas del estado español merecemos el reconocimiento profesional en los mismos términos que otras profesiones. Creemos que es preciso estructurar el mercado del paisajismo y legalizar su correcto ejercicio para potenciar este mercado y evitar confundir al consumidor potencial.
Deseamos y merecemos poder optar a concursos, contratos y convocatorias de las administraciones públicas en igualdad de condiciones respecto a ingenieros y arquitectos superiores, en las áreas de actividad internacionalmente reconocidas como propias de nuestra profesión
Deseamos que se den las condiciones para poder crear un órgano de representación profesional moderno y adaptado a las necesidades de la sociedad y el consumidor, dotado de atribuciones suficientes, que garantice la capacitación y la calidad de las cualificaciones de todos los profesionales del paisajismo a nivel estatal.
Ha llegado hasta nuestros oídos que la Unión Europea desea ayudar a cubrir la demanda de profesionales de elevada cualificación que habrá en la UE hasta el año 2020 y para ello está en pleno proceso de modernización de la Directiva 2005/36. Creemos que la voz de los paisajistas españoles no está representada en este proceso, ya que no tenemos un colegio profesional que nos represente y tememos ser relegados una vez más.
Deseamos participar en igualdad de condiciones con nuestros colegas europeos en el proyecto de construcción de una Europa más integrada y competitiva. No deseamos permanecer al margen por más tiempo.
Por tanto, creemos imperativo que la profesión de Paisajista se incorpore a la directiva con los mecanismos para el reconocimiento automático de profesiones, para garantizar que nuestras aspiraciones se vean realizadas. Para evitar que la actual situación de no reconocimiento se mantenga en el tiempo, solicitamos también que la comisión Europea incluya el Paisajismo en la lista de profesiones reguladas, para garantizar que el Estado Español así lo haga llegado el momento.
Por lo tanto, le rogamos encarecidamente su apoyo para garantizar que el Parlamento Europeo apruebe esta modesta petición.
Por último indicar que el manifiesto se suscribe a nivel personal, y todas las asociaciones o entidades que lo consideren necesario pueden apoyarlo como lo puede apoyar cualquier persona.
Para que tenga más difusión lo podéis encontrar traducido a varios idiomas: Español, Inglés, Francés, Portugués, Italiano, Alemán Gallego y Catalán
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